Hace unos días que tenia ganas
de escribir un artículo y es que luego de 3 meses de parto me entró un día el
agobio (no le llamaré depresión postparto porque la depresión es un asunto
serio que afecta realmente a muchas personas y va mas allá de las emociones) me
pasó algo inusual, se derramó una sopa y no pude mas que llorar, así como lo
lees, llorar literalmente, me fui a mi cama lloré, me desahogué con la almohada
unos segundos, luego recé y volví a la cocina. Y es que muchas veces queremos
llegar a todo pero tras varios días de no poder dormir por los terrores
nocturnos de la de 3 años, el frío que está haciendo, la vuelta al cole
procurando que fuese la mas adecuada, el trabajo, mi deseo de retomar las
conferencias y mi break absoluto de 3 semanas en la tesis doctoral y al final
he sucumbido por "la sopa".
Os cuento esto, porque muchas
amigas me dicen, "Que valiente" "Como te las apañas con 5"
"eres una campeona", etc. y déjenme decirles que no soy mas que los
demás porque nos atrevimos a recibir a los 5, sino que simplemente nos vamos
adaptando según la llegada de cada uno de ellos a nuestras vidas así como nos
adaptamos a los nuevos trabajos, casas, barrios, países, etc.
Soy normal, no tengo nada de
especial mas que el hecho de saberme única e irrepetible como cada una de
vosotras. Se que cuento con el amor de mi marido (porque esto es de dos no mío
sola) y de mi familia para que salgamos adelante pero sobretodo me se amada por
Dios y sabiendo que el mira todo lo que hago, procuro hacerlo bien y cuento con
su ayuda para que así sea y me de mas fuerzas o alcance del que yo sola podría,
allí es donde reside mi secreto.
Animo chicas, cuando te
sientas cansada y que no puedes mas, recuerda que serás mas recordada por tus
hijos que por tus viejos compañeros de trabajo, por tus familiares que por tus
vecinos. Dale a ellos lo mejor de ti y no al revés. Y aun mejor dale a tu marido
un trato amable y cariñoso, créeme, te encantará que te lo devuelvan jejejeje.
Y el título lo he elegido
porque me suele pasar que me desplomo después de pasada la tormenta, después
del atraco, de la conferencia, de la presentación, de los retos con los hijos,
el conciertos, etc. Allí es cuando me entero del nivel de estrés que he
enfrentado. Esta vez fue 3 meses después de la llegada de la hija numero 5.
Gracias por leerme y
seguirme...
Les recuerdo que pueden hacerlo a través de mi cuenta de Instagram y Facebook Moviecoach y Twitter @moviecoaching.
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