martes, 12 de noviembre de 2019

Cita a ciegas... con la mujer que habita en mi.

Debo comenzar por hablar de que las personas tenemos tres dimensiones, corporal, psíquico y espiritual, esta tercera es la que muchos llaman el corazón. Como las matrioskas. Es la dimensión mas olvidada hoy día y a la que dedico este articulo, que trata sobre un taller con el mismo nombre. Ya que, todas las dimensiones forman una sola persona, no podemos desprendernos de ninguna de ellas, somos almas copóreas, somos más completas cuando las alimentamos todas.

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Hace muchos años, lo tenía todo, familia, trabajo, riquezas, amigos, todo lo que se puede desear, pero, me tocó emigrar. Cuando me fui descubrí que mi vida estaba construida sobre la arena y que todo se derrumbaba, todo aquello que creía tener se volvió agua. Al igual que le sucedió a Liz en "Come, reza, ama"

Así que decidí volver a estudiar, estaba centrada en mis dimensiones corpóreas y en mi psique sin dar mayor importancia a mi vida interior. Cuando decido estudiar coaching me toca descubrirme a mi misma y cuando finalmente hago el master de matrimonio y familia es cuando descubro que eso que tanto había buscado, en realidad me buscaba ya a mí y me estaba esperando. Descubrí mi dimension espiritual y eso respondió a muchísimas de mis preguntas y me replanteo la vida.


A partir de allí mi familia pasó a ocupar el primer lugar, descubrir mis talentos y ponerlos al servicio de los demás fue mi siguiente meta.


Algo que siempre supe, volvió a mi, me apasiona educar, hablar en público y ayudar a los temas, especialmente en el tema de la educación de los hijos, al felicidad en la pareja y en el descubrimiento de uno mismo, después de todo, quiero que los demás tambien se encuentren consigo y con su trascendencia como yo mismo lo he vivido.

Ahora que se no va de mí, va sobre algo mas grande que yo pero que quiere que yo haga algo, que me encuentre y me ponga al servicio de los demás, que sea feliz en ese camino y que lleve esa buena noticia a otros.

Hoy quiero mostrarte un pequeño itinerario:

1.- Hacer silencio. Comienza por 5 minutos al día, pero haz una rutina de hacer silencio a diario, deja de recibir información y ruido por un rato y respira profundo. Cuando ya lleves varios días dominando el silencio puedes pasar al siguiente nivel.

2.- Haz silencio pero ahora usando un medio material para avanzar en el diálogo interior, elige un libro 📖 y toma un diario, comienza a escribirte a ti misma, haz recuento de tu día, de tus sueños, pensamientos, sentimientos, anhelos, experiencias, conocerte mejor. Puede ser al estilo de Brigitte Jones.  Sé agradecida.

Quieres ser feliz? Sé agradecido. Conferencia TED.


3.- Comienza a hablar con alguien mas por encima de ti, Usa ese tiempo para ir mas allá y hablar con alguien mucho mas elevado, un familiar que ya partió, tu Angel de la guarda, la Virgen Maria, Jesus, Dios padre, mírate bajo los ojos de alguien que te ama con locura y oye lo que quiere decirte.


4.- Escribe una carta a 10, 15, 20 o 25 años y redacta como seria tu día ideal en esa fecha, eso te ayuda a verte sin limitaciones y necesidades, a descubrir realmente cual es tu propósito. Para que soy buena, que me gusta, qué dicen los demás que hago bien, es un examen interior.
Conferencia de Rick Warren sobre una vida con propósito.


Después de todo este itinerario estarás mas cerca de tu yo mas interior, de ver el fondo de tu corazón, de desarrollarte de modo integral, no solo tu cuerpo y tu inteligencias, sino también tus afectos, tu interioridad.


Querida amiga, merece al pena, porque el tiempo pasa rápido y hay que dedicarlo a eso que amamos, que nos hace felices. No solo a lo que nos da de comer pero detestamos que ya llegará la jubilación, ni tampoco solo a ello que nos es placentero pero no nos lleva a ningún lugar.

Debemos descubrir nuestra propósito y dejar un legado, que seamos recordadas por que fuimos nosotras mismas, porque nos entregamos en lo que hicimos, nos encontramos con las demás personas en su aspecto más profundo.


Deja un legado y vivirás para siempre en los demás. Carpe Diem.


jueves, 10 de enero de 2019

Que difícil es ser profeta en tu tierra

No resulta sencillo ser reconocido entre los que mas conocen, por las habilidades adquiridas, los logros obtenidos, en primer lugar porque en la familia y con los verdaderos amigos se nos ama por ser, por quien somos y no por nuestros méritos o títulos, pero a veces caemos en el extremo de dar todo por sentado.

Recordamos a Ross Geller en la mítica serie Friends, quien era doctor porque poseía un doctorado, pero su novia y amigos consideraban eso una especie de titulo falso, como una mentira.


No le daban crédito, era el mas formado pero para ellos era simplemente Ross, no vale ni mas ni menos que los demás, y eso es bueno, pero también es bueno que los demás nos acompañen en esos retos y éxitos y se muestren orgullosos, que no vayamos solos por ella vida en esas pequeñas batallas. 

Os invito a ver este video de Goyo Jiménez hablando de los americanos, ademas de sacarte unas risas, nos lleva también a analizar cómo a veces nos subestimamos demasiado y/o a los nuestros. Se nos da mejor ver lo maravilloso que hay en casa del vecino, en lugar de la nuestra. 

Debemos aprender a valorar más lo que tenemos, la pareja, la familia, los hijos, los amigos, el trabajo, al ciudad, el país, ser agradecidos, humildes de corazón. 


Este año ha sido muy popular un juguete llamado Ksimeritos, tienen los ojos super grandes y abiertos, brillantes y alegres, que estos nos inspiren a mejorar nuestra mirada, que tengamos los ojos bien abiertos para descubrir el amor que nos tienen los demás, las maravillas que hay a nuestro alrededor, hay tanta belleza, alegría, buen humor, cariño, buenas acciones, pero siempre estamos hablando de todo lo que está mal.


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Seamos como los Ksimeritos con los ojos abiertos para ver las maravillas que tenemos alrededor y nos llenemos de ilusión y ganas de vivir.
Queramos mas y mejor a los nuestros y reconozcamos primero que nadie lo mucho que se esfuerzan por crecer y ser mejores. 

Cita a ciegas... con la mujer que habita en mi.

Debo comenzar por hablar de que las personas tenemos tres dimensiones, corporal, psíquico y espiritual, esta tercera es la que muchos llaman...